Queridas compañeras y compañeros:
Por fin termina este duro año, que sin lugar a dudas recordaremos como el año del coronavirus, una pandemia que ha puesto patas arriba al mundo. El año que incorporó a nuestras vidas los confinamientos, los cierres perimetrales de los barrios y toques de queda… y SOBRE TODO UN AÑO QUE NOS TRAJO LA PÉRDIDA DE TANTAS VIDAS Y TANTO SUFRIMIENTO. Queda claro que el 2020 ha sido un año aciago y que casi con toda seguridad much@s de nosotr@s estamos deseando dejar atrás.
Este 2020 deberá ser además recordado como el año donde miles de trabajadoras y trabajadores de la sanidad, de las residencias y los cuidados, de la limpieza, del comercio, del transporte, de la alimentación, de la educación… tuvieron que ponerse a la cabeza para enfrentar de manera incansable a este maldito virus.
Os deseamos a vosotr@s y vuestras familias que el 2021 nos traiga la fuerza y el ánimo necesario para que las mascarillas no tapen la protesta ni la rebeldía, porque la resignación no puede convertirse en una opción.
Como siempre decimos a la clase obrera nadie nos va a regalar nada y todo aquello que consigamos va a ser fruto de nuestra lucha, de nuestro tesón y sobre todo de ser muy firmes en todo aquello que venimos defendiendo. En esa lucha nos encontraremos.
Un fuerte abrazo para tod@s vosotr@s y para vuestras familias.