Desgraciadamente, la mayoría de los trabajadores y trabajadoras estarán muy por debajo de los 900 euros del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) ya que el contrato a tiempo parcial, con salarios mensuales de 500 o 600 euros, ya es mayoritario en un sector como el de Grandes Almacenes donde las empresas que lo componen son multinacionales (Carrefour, El Corte Inglés, IKEA, MediaMarkt, FNAC, Apple, Alcampo, etc.) con beneficios multimillonarios.
Y si recordamos que la Carta Social Europea sitúa el límite de la pobreza en un salario de 1.084 euros, prácticamente todas las trabajadoras y trabajadores de Grandes Almacenes, de tiempo completo o no, con mayor o menor antigüedad, estarían por debajo, porque el salario neto mensual de la mayoría de nosotros y nosotras no llega a esa cantidad.
Ya lo decíamos desde la Sección Sindical de co.bas en FNAC en mayo de 2017, fecha de la firma del convenio colectivo por parte de CCOO, UGT, Fetico y Fasga, y las empresas de Grandes Almacenes: que esto era un «Atraco Perfecto» a los derechos de los trabajadores y trabajadoras. Y que nos perpetuaba como trabajadores pobres y precarios.
Ahora entendemos la sonrisa de la parte empresarial en la foto de «familia» de la firma del convenio. La que nos parece esperpética es la sonrisa de la parte «social», es decir de los sindicatos firmantes, de CCOO y UGT. ¿Es graciosa la pobreza laboral? ¿Son graciosas las condiciones de trabajo en cualquier empresa de Grandes Almacenes?
Fotografía de los sonrientes firmantes del convenio (mayo de 2017)
Sólo ha habido que dejar rodar un tiempo el citado convenio colectivo para comprobar que tras casi 9 años de congelación salarial y eliminación del pago de domingos y festivos, ese 2,5% de subida salarial inicial a la que se sumaba un 1% anual hasta 2020, y que nos vendían como un logro digno de las sonrisas de la foto, lo que escondía realmente era el mantenimiento de unas condiciones salariales de pobreza laboral, ya que tras la congelación y los recortes, partíamos de una situación salarial realmente muy precaria, que necesitaba de un aumento mayor. Concretamente, el que asegurara una percepción salarial digna y acorde al precio creciente de la vivienda, la luz y el agua.
Y es que una vez que el Salario Mínimo Interpofesional (SMI) mensual ha alcanzado los 900 euros, lejos aún de los 1598 euros del SMI Francés y de los 1084 euros mensuales que como decimos establece la Carta Social Europea como límite de la pobreza, el salario base mensual en 2019 de un trabajador o trabajadora que sea contratado a tiempo completo en FNAC o cualquier otra empresa de este sector será sólo superior en sólo 11 euros al SMI mensual. Los trabajadores con más de 3 años de experiencia tampoco escaparán de esta miseria dado que tan sólo cobrarán mensualmente 39 euros más.
Dirán los firmantes que en este cálculo no tenemos en cuenta las dos pagas extras que tenemos de más desde hace décadas, aunque en cada negociación amenazan con quitarlas para que la mierda firmada finalmente no parezca tan mala. De todos modos, incluyendo estas dos pagas prorrateadas al salario base mensual, éste estará a poco más de 100 euros del SMI actual de 900 euros.
Pero el salario mensual de la mayoría de los trabajadores y trabajadoras de Grandes Almacenes seguirá estando por debajo del SMI porque la mayoría lo son, involuntariamente, a tiempo parcial.
Otras de las «trampas» del miserable convenio colectivo firmado por UGT y CCOO junto a los sindicatos de empresa fasga y fetico es que no establece ningún límite a la contratación a tiempo parcial, que ya se ha convertido en mayoritaria en este sector, por lo tanto, tras la subida del SMI, la mayoría de los trabajadores ingresarán mensualmente un salario neto muy por debajo de esa cantidad, e insuficiente para satisfacer sus necesidades y la de sus familias, tal y como recoge el artículo 35 de la tan estimada Constitución Española.
Desde aquí invitamos a los seguidores de la Carta Magna a que antes de celebrar sus 40 años intenten vivir con menos de 1000 euros, y luego nos digan si es una Constitución para la Clase Trabajadora o para quién.
Un nuevo atraco de nuestras condiciones de trabajo en Grandes Almacenes. Y esta vez con la firma de CCOO y UGT después de decirnos que no iban a firmar algo así, para finalmente firmarlo sonrientes. Porque como decimos, después de haber sufrido durante años la congelación del salario, la eliminación del pago de domingos y festivos, y de los tres primeros días de baja, sufrimos una pérdida de poder adquisitivo del 15%, que no se recupera con la subida salarial firmada.
La trampa final: el convenio contiene una cláusula que permite absorber la subida salarial.
Para lograr la perfección del atraco aún faltaba una claúsula digna de la ingeniería del mal: la absorción y compensación de la subida salarial. Y las sonrisas de los firmantes en la foto nos decían que no iba a faltar. Y así fue, y muchos de los trabajadores y trabajadoras de FNAC, y otras empresas del sector, vieron como de su complemento funcional ganado a pulso con su trabajo diario, su experiencia y su responsabilidad, le restaban, y le restan cada año, la misma cantidad que le sube el salario base…
Lo dicho: imposible negar la perfección del atraco.
La RAE define atraco como la acción de asaltar con propósito de robo. Y en definitiva esto es lo que fue este nuevo convenio colectivo: un asalto en el que entre todos se propusieron robar a la mayoría las posibilidades de tener un contrato, un salario y un descanso semanal digno.
Y lo consiguieron:
– El convenio no tiene límite ninguno a la precariedad laboral: La mayoría de contratos seguirán siendo de tiempo parcial, con salarios de entre 500 y 600 euros.
– Después de años de absorciones, congelaciones y bajadas salariales, nuestro sueldo sigue desactualizado en más de un 10% con respecto al aumento del coste de la vida en estos años, y la diferencia existente entre nuestro salario base y el Salario Mínimo Interprofesional es ya la menor desde 2008…
– El convenio establece que los trabajadores y trabajadoras cuando son contratados, cobren menos por el mismo trabajo que los demás, ¡¡durante tres años!!
– Seguimos sin cobrar los tres primeros días de baja que nos quitaron en su día
– Seguimos teniendo un descanso más propio del siglo XIX: 6 fines de semana libres al año.
– Seguimos descansando días sueltos a pesar de que el Estatuto recoge que el descanso semanal comprenderá la tarde del sábado o, en su caso, la mañana del lunes y el día completo del domingo.
– Seguimos trabajando todos los domingos y festivos que quieren, y gratis también. Las madres y padres también…
Además, el convenio impide que nos hayan bajado 10 jornadas de 9 horas en FNAC…
El día 28 de marzo de 2018 recibimos la sentencia de la Audiencia Nacional sobre la demanda que pusimos en solitario desde co.bas por la modificación de la jornada laboral que llevó a cabo unilateralmente FNAC a finales de 2017, modificando también el acuerdo que había alcanzado en 2015 con los trabajadores para que las jornadas de aquellos/as que trabajan 6 días por semana en las tiendas de apertura generalizada fueran sólo de 7 y 9 horas.
Y la sentencia desgraciadamente es clara y contundente: el convenio colectivo de Grandes Almacenes firmado por CCOO-UGT-FETICO-FASGA faculta a FNAC para distribuir irregularmente la totalidad de la jornada a lo largo del año.
Es decir, y como ya os habíamos avisado, este convenio es la misma mierda que los anteriores. Maquillado con una subida salarial insuficiente, pero en lo fundamental con las mismas condiciones precarias y de explotación laboral.
Apoyando a CCOO, UGT, Fetico y Fasga estás tirando piedras contra tus propios derechos. Que no te vendan la moto.
En 2019, luchemos por conseguir unas condiciones laborales dignas en FNAC y en el resto de Grandes Almacenes.