CUANDO EL ABANDONO DE LAS ADMINISTRACIONES PÚBLICAS Y LA PRIVATIZACIÓN DE LOS
RECURSOS NOS CUESTA LA VIDA. LA PRECARIEDAD MATA.
Desde el Sector Social del Sindicato Co.bas, queremos expresar nuestra más profunda indignación y dolor por el trágico asesinato de nuestra compañera Educadora Social en un centro de menores en Badajoz. Este hecho no solo es una terrible pérdida humana, sino también un reflejo de las condiciones de precariedad y desprotección en las que las trabajadoras y trabajadores del ámbito social desarrollan su labor.
Este asesinato se produce entre otras cosas, por la mercantilización y la precarización del sector social, donde una trabajadora se encontraba sola, sin compañeros-as (podría haberse evitado). Estas circunstancias son comunes dentro de nuestras profesiones donde existen Servicios Públicos en manos de empresas privadas, donde sólo hay 1 profesional por turno para atender a más de 15-20 personas con las problemáticas que arrastran.
Pero este riesgo y vulneración no es importante para las empresas ya que, lo único que buscan es el beneficio a coste de recortar los derechos laborales y el abandono de las personas que atendemos, todo ello con el beneplácito y complicidad de las Administraciones Públicas que pretenden abandonar el modelo de bienestar social para volver a la beneficencia y caridad.
La Educadora Social asesinada dedicaba su vida a la protección y el acompañamiento de menores en situación de vulnerabilidad, una labor esencial para la construcción de una sociedad más justa y solidaria. Sin embargo, su asesinato nos obliga a denunciar las condiciones laborales indignas que enfrentan muchos profesionales del sector: falta de recursos, sobrecarga de trabajo, salarios insuficientes y sobre todo, una alarmante falta de medidas de seguridad para quienes desempeñan estas tareas.
Este crimen no es un hecho aislado, sino la consecuencia de un sistema que precariza y desprotege a quienes trabajan en la primera línea de la intervención social. Las Administraciones Públicas y las entidades responsables de estos centros deben asumir su responsabilidad y garantizar condiciones laborales dignas y seguras para todas las personas que trabajan en este ámbito.
Exigimos:
- Depuración de Responsabilidades: Que se esclarezcan todos los hechos y que las
personas responsables política y administrativamente sean cesadas de sus puestos de
forma inmediata. - Medidas de seguridad urgentes: Que se evalúen los riesgos reales a los que nos
enfrentamos en nuestros puestos de trabajo, para garantizar un trabajo de calidad y
seguro, implantando protocolos de seguridad efectivos en todos los centros y servicios
sociales, incluyendo la dotación de personal suficiente y la formación adecuada para
prevenir situaciones de riesgo. - Que se establezcan ratios: de atención por profesional y disminución de plazas en
“macrocentros”, para invertir en un modelo con centros más reducidos y que no se
conviertan en guetos de exclusión. - Fin de la precariedad laboral: Que se mejoren las condiciones laborales de las personas
que trabajan en el sector, con servicios públicos de gestión directa y no externalizados
en empresas privadas, con salarios dignos, contratos estables. - Reconocimiento y apoyo al sector: Que se valore la labor esencial de las y los
profesionales de la intervención social, dotándoles de los recursos necesarios para
desempeñar su trabajo con dignidad y seguridad.
Desde el Sector Social del Sindicato Co.bas, nos solidarizamos con la familia, compañeras y compañeros de la Educadora Social asesinada, y reiteramos nuestro compromiso en la lucha por unas condiciones laborales dignas y seguras para todas las personas trabajadoras. No permitiremos que su muerte caiga en el olvido ni que se normalice la precariedad y el abandono en el sector.
HACEMOS UN LLAMAMIENTO A TODO EL SECTOR A LA CONCENTRACIÓN CONVOCADA PARA
EL 13.03.25 A LAS 17.00 EN LA CONSEJERÍA DE FAMILIA, JUVENTUD Y ASUNTOS SOCIALES DE
LA COMUNIDAD DE MADRID (CALLE O´DONELL 50)

